Cultivar un huerto en casa no solo ofrece beneficios tangibles como el acceso a alimentos frescos y orgánicos, sino que también tiene efectos terapéuticos significativos en la salud mental y física.
La jardinería doméstica ha sido objeto de numerosos estudios científicos que destacan sus múltiples beneficios. A continuación, exploramos los efectos terapéuticos de cultivar un huerto en casa.
Reducción del Estrés y la Ansiedad
El trabajar con la tierra tiene un impacto positivo en la reducción del estrés y la ansiedad. La interacción con la naturaleza y la realización de actividades al aire libre pueden inducir un estado de relajación y tranquilidad.
Un estudio publicado en el Journal of Health Psychology titulado: Gardening promotes neuroendocrine and affective restoration from stress que fue publicado en el 2011 encontró que la jardinería ayuda a reducir los niveles de cortisol, la hormona del estrés, y mejora el estado de ánimo.
Mejora del Estado de Ánimo y la Felicidad
Un meta-analysis realizado por Soga, Gaston, & Yamaura en el 2017 concluyó que la jardinería está asociada con un aumento significativo en la felicidad y la satisfacción con la vida. Esto, debido a que la exposición a la luz solar y el aire fresco, junto con la actividad física ligera, pueden mejorar el estado de ánimo y aumentar los niveles de serotonina, un neurotransmisor relacionado con la felicidad.
Estimulación Cognitiva
El cuidado de un huerto requiere planificación, resolución de problemas y aprendizaje continuo, lo que puede estimular las funciones cognitivas y retrasar el deterioro cognitivo relacionado con la edad.
Un estudio realizado por Wang & Glicksman en el 2013 sugiere que la jardinería puede mejorar la memoria, la atención y otras funciones cognitivas en adultos mayores.
¿Qué esperas para comenzar?
Cultivar un huerto en casa ofrece una amplia gama de beneficios terapéuticos que abarcan desde la reducción del estrés y la mejora del estado de ánimo hasta la promoción de la actividad física y la estimulación cognitiva.
La evidencia científica respalda estos efectos positivos, subrayando la importancia de la jardinería como una actividad beneficiosa para la salud integral.
Incorporar un huerto en casa no solo enriquece la vida con productos frescos y saludables, sino que también nutre el cuerpo y la mente, proporcionando un refugio de tranquilidad y bienestar en el ritmo a menudo frenético de la vida moderna.
Referencias:
Van Den Berg, A. E., & Custers, M. H. (2011). Gardening promotes neuroendocrine and affective restoration from stress. Journal of Health Psychology, 16(1), 3-11
Soga, M., Gaston, K. J., & Yamaura, Y. (2017). Gardening is beneficial for health: A meta-analysis. Preventive Medicine Reports, 5, 92-99
Wang, D., & Glicksman, A. (2013). Being in nature and gardening promotes neuroendocrine and affective restoration from stress. Innovation in Aging, 1(Suppl_1), 740-740