Ingredientes:
Base:
1 taza de dátiles
1 taza de almendras
Relleno :
1 ½ taza de anacardos (pepita de marañón)
¼ taza jugo de limón
1/3 taza aceite de coco
2/3 taza de leche de coco
½ taza de miel de abeja/ raspadura
Saborizantes opcionales:
2 cucharadas de mantequilla
de maní o 1/4 taza de arándanos
(frescos/congelados)
Instrucciones:
- En un procesador tritura los dátiles hasta formar una pelota.
- Por separado, tritura las almendras hasta obtener un polvo. Ahora agrega los dátiles
triturados hasta formar una masa. La masa debe permanecer junta cuando la aprietas.
Si está demasiado seca agrega unos cuantos dátiles más. Si está demasiado húmeda,
agrega almendras. Puedes agregar una pizca de sal opcional. - Engrasa la bandeja para cupcakes. Para que sea más fácil remover los cheesecakes
después de sacarlos del congelador, puedes cortar tiras de papel de cera y colocarlos en
cada espacio antes de echar la mezcla. - Toma una cucharada de base y presiónala con tus dedos dentro de cada espacio de la
bandeja. Para que quede mejor fijada puedes utilizar la parte posterior de un
vaso o de una cuchara. Colócalo en el congelador. - Toma los ingredientes del relleno y licúalos hasta obtener una textura suave y
cremosa. - En este momento puedes agregar los saborizantes opcionales. Si vas a utilizar los
arándanos, puedes mezclarlos con el relleno, o esperar a agregarlos encima una
vez que el cheesecake esté terminado. - Coloca el relleno sobre las bases. Una vez colocado los rellenos, golpea ligeramente
por encima con una cuchara para liberar cualquier burbuja de aire. Cubre con un
plástico y congela hasta que esté sólido. Aproximadamente 4-6 horas. - Disfruta